La articulación temporomandibular (ATM) es la unión que conecta a la mandíbula con el cráneo. Todos contamos con 2 ATM, uno en cada lado de cara, estas articulaciones son las que nos permiten abrir y mover la boca con normalidad al actuar como bisagras deslizantes.
El trastorno de la ATM afecta los músculos de estas articulaciones, como consecuencia el paciente puede sentir dolor continuo y presentar problemas para masticar, tragar, hablar o incluso respirar. Luego del dolor de dientes, la segunda causa de dolor facial son los trastornos de la ATM.
En este artículo profundizaremos en los síntomas, causas, consecuencias y los tratamientos disponibles para los pacientes que sufren algún trastorno de la ATM.
Síntomas del trastorno en la articulación temporomandibular
Para que tu ATM funcione correctamente tus huesos, musculatura, ligamentos y cartílago articular deben encontrarse en perfecto estado. Si alguno de estos componentes se ve afectado lo notarás de inmediato. Entre los síntomas que pueden generan los trastornos de la ATM se encuentran los siguientes:
- Dolor o dificultad al momento de masticar.
- Chasquido articular al mover la mandíbula.
- Mordida desencajada.
- Sensibilidad o dolor al tacto en el área de la mandíbula.
- Dolor en la cara, cuello u oídos.
- Rigidez en los músculos de la cara.
- Bloqueo o movimiento limitado de la articulación.
Causas del trastorno de la ATM
La causa exacta del trastorno no siempre es fácil de determinar. En ocasiones los síntomas son generados por una combinación de factores. Las molestias suelen aparecer sin alguna razón aparente en los pacientes y en muchos casos los dolores pueden ser pasajeros.
Los huesos que interactúan en las articulaciones temporomandibulares se encuentran cubiertos de cartílagos y están separados por un pequeño disco que permite que los movimientos sean suaves. Por lo general, los trastornos de la ATM ocurren cuando:
- El cartílago de la articulación se ve afectado por enfermedades como la artritis o la artrosis: Estas enfermedades pueden desgastar el menisco o incluso entorpecer su movimiento.
- El pequeño disco se desalinea o se erosiona: Al no permitir el normal desplazamiento, el paciente siente dolor por el bloqueo y el roce generado.
- Existe una afectación en los ligamentos: Estas estructuras pueden inflamarse, lo cual provoca un gran dolor y causa la pérdida de la capacidad elástica de la articulación.
- Espasmos musculares: Una contractura en los músculos de la cara o el cráneo generará una presión adicional en la ATM y condicionará la movilidad de la mandíbula.
- Un golpe o fuerte impacto daña la articulación: Una incorrecta posición ósea no permitirá el normal desplazamiento de la articulación.
Además, en algunos casos el trastorno puede aparecer como consecuencia de un tratamiento dental, una infección, o incluso el hábito de hacer tensión sobre la mandíbula en exceso, como en el caso de bruxismo.
Factores de riesgo
Existen diversos factores que aumentan el riesgo de padecer trastornos temporomandibulares. Veamos a continuación los más comunes:
- Padecer algún tipo de artritis o artrosis.
- Sufrir una lesión en la mandíbula.
- Ciertas enfermedades asociadas al tejido conectivo.
- Apretar o rechinar los dientes de forma crónica.
Consecuencias de los trastornos de la ATM
Un paciente con trastornos de la ATM puede sufrir los siguientes inconvenientes:
- Dolor: La principal queja de los pacientes son los dolores en el área mandibular. En algunos casos los dolores se extienden hacia el cuello, oídos y cabeza.
- Función del habla: El dolor, la dificultad de movimiento, las desviaciones laterales y el ruido de las articulaciones pueden afectar la capacidad de pronunciar correctamente ciertos fonemas. Como resultado, se notará un cambio en la manera de hablar del paciente.
- Deglución: Dado que el trastorno afecta la capacidad de abrir la boca de modo natural, algunos pacientes pueden enfrentarse a diversos inconvenientes a la hora de comer. El proceso de masticado se dificulta y genera mucha incomodidad, debido a la limitación de movimiento. Para disminuir las molestias se les recomienda a los pacientes evitar la ingesta de alimentos duros.
- Higiene bucodental: Los pacientes puede presentar dificultades para llevar a cabo su rutina diaria de limpieza dental. La limitación de movimiento en algunos casos es tan severa que el paciente no podrá ver sus piezas posteriores, por lo que le será imposible usar correctamente el hilo dental. Por lo que será necesaria una limpieza profesional de manera más frecuente.
En los casos más graves, las consecuencias del trastorno generan una aflicción permanente, lo que impide a los pacientes desarrollar sus actividades cotidianas y disminuye notablemente su calidad de vida.
Tratamientos para los trastornos de la ATM
En la odontología integral, antes de establecer el tratamiento correcto, debemos realizar un examen detallado de la articulación con la finalidad de identificar las posibles causas del trastorno. Este paso es de suma importancia, ya que nos permite descartar otras patologías con síntomas similares. Algunos son tratamientos sin dolor y se caracterizan de la siguiente manera:
- Medicación: En algunos casos con solo recetar los analgésicos y antiinflamatorios adecuados, el paciente notará una mejora, la tensión de su boca y cuello se reducirá y el dolor desaparecerá.
- Férula de descarga: Recomendado en el caso de pacientes con trastorno de bruxismo (hábito crónico de rechinar y apretar los dientes). Esta férula le permite al paciente relajar la mandíbula y de esta forma evitar las consecuencias de su hábito, como, por ejemplo, el desgaste dental y el dolor constante.
- Ajuste oclusal: Se aplica cuando se detectan anomalías en las superficies dentarias que obstruyen la función mandibular. Consiste en la remodelación y ajuste selectivo de las superficies dentarias en cuestión.
- Tratamiento de fisioterapia y osteopatía: Mediante diversos tratamientos de fisioterapia es posible enseñar al paciente ejercicios de estiramiento de la mandíbula, así como relajar la musculatura de la cara. Esto permitirá el acomodo de las articulaciones y potenciará su movilidad. Posteriormente, se podrán aplicar los tratamientos de ortodoncia y correcciones necesarias.
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