Solucionar la sensibilidad dental generalmente requiere de un cambio en los hábitos alimenticios y de higiene de la persona. A veces la causa no es por una enfermedad gingival como la piorrea, sino por una mala técnica de cepillado. Asimismo, beber en exceso y fumar tabaco resultan en el desgaste del esmalte del diente y sensibilidad en los tejidos que la rodean.

Los dolores pueden llegar a ser extremadamente agudos. Hay personas que poseen una alta sensibilidad a las temperaturas, donde las bebidas y comidas frías o calientes generan una dolorosa punzada que tarda en desaparecer. Esto impide que el afectado pueda disfrutar de ciertas situaciones sociales, lo que genera frustración y enfado.

Lo más recomendable es visitar un dentista. Este profesional será capaz de identificar el origen del problema, porque hay casos donde la sensibilidad no es provocada por un problema de alimentación o malos hábitos, sino enfermedades que pueden ser desfavorables para la salud bucal.

Sabemos que este tema es sumamente relevante para cientos de personas. Por esta razón, en la Clínica Dental Palomero hemos decidido ampliar tu información con el fin de poder ayudarte a solucionar tu problema de forma efectiva y correcta.

¿Cuáles son los síntomas que advierten sobre la sensibilidad dental?

La sensibilidad dental es una sensación dolorosa que se produce inmediatamente después de ingerir ciertos alimentos o bebidas. Aunque también se puede generar por las temperaturas del ambiente. Una persona que lo padece puede reconocerlo con facilidad debido al punzante dolor en los dientes o encías ante cierto tipo de estímulos.

El nivel de dolor puede variar según la gravedad de la sensibilidad o hipersensibilidad. Sin embargo, tienden a ser de corta duración. Las causas pueden variar, pero se sabe que las personas con edades entre 18 a 40 años tienen más posibilidades de padecerla. Es una de las razones más comunes de visita al dentista.

¿Cuáles son las causas que producen la sensibilidad dental?

Cuando los dientes sufren una perdida de la dentina, la cual tiene una capa que protege la encía, el esmalte dental y cemento radicular, las piezas y las zonas que la rodean queda vulnerable a los estímulos, sean térmicos, táctiles o químicos. El dolor se produce porque la dentina está conformada por túbulos dentinarios, los cuales conectan el exterior de los dientes con sus propios nervios.

Como ya puedes imaginar, sin la protección, los nervios y las células quedan expuestas. Lo que genera la sensación o punzada dolorosa. Existen una gran variedad de razones por las cuales se pierde la dentina. Entre ella están:

Bruxismo

El bruxismo es un trastorno donde el paciente, sin darse cuenta, aprieta de forma excesiva los dientes, ya sea al momento de masticar o durante las horas de sueño. También, de manera involuntaria, los rechinan. Esta acción puede generar no solo sensibilidad en las piezas dentales, sino también la retracción de la encía, aparición de enfermedades dentales y mucho más.

Dientes rotos por lesiones

Ya sea que estés practicando un deporte de riesgo o hayas tenido un accidente, los dientes rotos pueden dañar el esmalte dental y la dentina. En cualquiera de los casos hay que acudir inmediatamente a un odontólogo.

Cepillado agresivo y técnica incorrecta

El cepillarse de manera agresiva desgasta la dentina, sobre todo si se utiliza un tipo de pasta que no favorece tus tejidos, y expone el diente. Lo mismo sucede si se realiza una técnica inadecuada de cepillado. Estas acciones también son perjudiciales hacia los tejidos blandos.

Hábitos alimenticios y mala higiene bucal

Hay que cuidar el tipo de alimentos que se ingieren, pues las bebidas que contienen alto contenido de cítricos o elementos carbónicos, pueden provocar la pérdida de dentina. Lo mismo sucede con los alimentos.

Por otro lado, una mala higiene bucal no solo provoca la erosión y sensibilidad en las piezas dentales, sino que también promueve la aparición de infecciones y patologías gingivales como la periodontitis. Asimismo, una limpieza deficiente provoca caries que pueden atravesar el esmalte con facilidad,

Tratamiento dental y blanqueamientos

Algunas personas quedan con los dientes sensibles después de realizar algún tipo de ortodoncia, blanqueamiento dental o una limpieza profesional hacia un paciente con exceso de sarro. Generalmente, las dolencias que ocurren por estos procedimientos son temporales, aunque en el caso de la ortodoncia la sensación de dolencia puede generar durante la masticación.

¿Qué se puede hacer para corregir la sensibilidad dental?

Existen formas caseras para disminuir el dolor que provoca la sensibilidad, aunque lo más recomendable es ir a un dentista para que determine cuál es el mejor tratamiento. Lo primero que debes hacer es adquirir un cepillo con cerdas suaves, evita las duras, pues pueden perjudicar más la dentina.

Igualmente, debes encontrar pastas dentales y enjuagues bucales especialmente diseñados para proteger los nervios de los estímulos. A su vez, tienes que empezar a tener hábitos saludables de limpieza bucal con un rutinario cepillado correcto y uso de hilo dental.

Disminuye la cantidad de fuerza utilizada durante el proceso de limpieza de los dientes. Otra acción que puede ayudarte es comenzar a ingerir alimentos y bebidas no abrasivas por la acidez o por los azúcares. Tampoco se deben consumir alimentos con altas o bajas temperaturas.

Es importante resaltar el hecho de que un profesional dental determinará la causas u origen del problema por medio de un estudio. Además de que te ayudará encontrar la mejor solución para tu problema.

Por otro lado, si tomas bebidas cítricas, evita que las mismas tengan mucho contacto con los dientes, puedes hacer uso de pajitas o beber agua después de consumir algún alimento o bebida ácida o azucarada. Esto es para mantener equilibrado dichos niveles.

En caos de sufrir de bruxismo y rechinar y apretar los dientes de forma involuntaria durante las noches, puedes solicitar un protector bucal con el dentista. Esto a modo de proteger los dientes de la erosión ocasionada por la constante fricción.

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